La Asamblea General de las Naciones Unidas ha vuelto a reunir en los últimos días a representantes de los estados para discutir el embargo de larga data de los Estados Unidos sobre Cuba. Con una gran mayoría de votos, se adoptó nuevamente una resolución que llama a la inmediata eliminación de este embargo, que se ha convertido en uno de los regímenes de sanciones más largos de la historia moderna. Esta medida, que se ha mantenido desde principios de la década de 1960, ha aislado casi por completo a Cuba en el ámbito económico global, limitando su acceso a mercados, socios comerciales y recursos esenciales necesarios para el desarrollo estable de la economía. El embargo se denomina en las discusiones como una forma de "agresión económica" que ha obstaculizado el crecimiento de Cuba durante décadas y ha afectado a todos los segmentos de su sociedad.

Cómo el embargo afecta la vida cotidiana de los cubanos

El embargo ha dificultado significativamente la vida de los ciudadanos comunes en Cuba a lo largo de los años. Según los representantes de Cuba en la ONU, el embargo no solo bloquea el comercio, sino también el acceso a la atención médica, productos alimenticios y necesidades básicas. Por ejemplo, debido a la incapacidad de importar medicamentos libremente, muchos pacientes con enfermedades crónicas se quedan sin terapias adecuadas. Los representantes de los países caribeños y latinoamericanos han señalado que la inhumanidad de tal embargo es especialmente visible en momentos de crisis de salud global como la pandemia de COVID-19, cuando Cuba no pudo importar respiradores y otros dispositivos médicos esenciales. En tales situaciones, el embargo no es solo una medida económica, sino también un obstáculo que pone en duda los derechos humanos básicos y el derecho a la vida. Además, debido al acceso limitado a los mercados, los cubanos se ven obligados a recurrir a métodos alternativos y a menudo más costosos para obtener productos básicos, lo que agrava aún más una situación económica ya difícil.

Presión internacional sobre Estados Unidos debido al embargo

Durante el debate en la Asamblea General, numerosos estados miembros reiteraron su llamado a Estados Unidos para que ponga fin al embargo y permita a Cuba un libre comercio y acceso a instituciones financieras globales. Vietnam, China, Rusia y una serie de otros países enfatizaron que el embargo viola los principios de igualdad soberana, que es uno de los principios fundamentales de la Carta de las Naciones Unidas. Un representante de Brasil destacó que las sanciones son contrarias a los objetivos de desarrollo sostenible y que es importante permitir que Cuba acceda a la ayuda internacional para que el país pueda mejorar sus capacidades en agricultura, educación y salud. Las Naciones Unidas han estado adoptando resoluciones que llaman a la eliminación de este embargo durante años, pero Estados Unidos sigue rechazando estos llamados, citando como razón el deseo de democratizar Cuba y proteger los derechos humanos de los cubanos. Sin embargo, los críticos argumentan que tal política en realidad dificulta la vida de las personas comunes, al tiempo que no contribuye a la estabilidad política.

Reconocimiento de Cuba por la ayuda internacional

A pesar del embargo, Cuba ha mantenido a lo largo de los años su posición como líder internacional en la prestación de asistencia médica a otros países. Durante la pandemia, los médicos cubanos brindaron ayuda médica a numerosos países de todo el mundo, incluidos aquellos más afectados por la crisis. Muchos países en la discusión destacaron que Cuba, con su enfoque, demostró la importancia del multilateralismo y la cooperación internacional, subrayando que el embargo impide que Cuba desarrolle aún más sus capacidades médicas y científicas. Los representantes de los países africanos elogiaron especialmente la contribución de Cuba al desarrollo de los sistemas de salud en África, y se destacó que la eliminación del embargo permitiría programas y colaboraciones adicionales que beneficiarían a toda la comunidad internacional.

Estados Unidos defiende su política

Los representantes estadounidenses en la ONU afirman que las sanciones tienen como objetivo fomentar reformas democráticas en Cuba y apoyar las aspiraciones de los cubanos hacia la libertad y la prosperidad. Señalan que el embargo incluye ciertas excepciones, como envíos humanitarios de alimentos y medicamentos, pero añaden que la política hacia Cuba se centra en proteger los derechos humanos. Los críticos consideran que esta postura no está en línea con los efectos reales del embargo y que este afecta principalmente a los ciudadanos comunes. Aunque Estados Unidos y Cuba restablecieron relaciones diplomáticas en 2015, las sanciones económicas se mantienen vigentes, y Estados Unidos sigue manteniendo a Cuba en la lista de patrocinadores del terrorismo. Esta medida dificulta aún más las relaciones económicas de Cuba con otros países y representa un obstáculo para una mayor integración de Cuba en el sistema económico global.

Aumento del número de partidarios de la eliminación del embargo

Según estadísticas recientes, la mayoría de los estados miembros de la ONU apoyan la eliminación del embargo, y la resolución de este año pasó con una abrumadora mayoría de votos en la Asamblea General. Muchos países consideran que el embargo representa un "anacronismo de la política de la Guerra Fría" que ya no tiene lugar en el mundo moderno. El embargo no solo bloquea el intercambio económico, sino que también impide a Cuba alcanzar los objetivos de desarrollo sostenible y reducir la pobreza. Además, los delegados enfatizaron que el embargo contribuye a las escaseces globales, especialmente en los sectores de alimentos y energía, y que la eliminación del embargo es clave para la estabilidad de los mercados internacionales y para abordar los problemas de inseguridad alimentaria. Este argumento adquiere peso dada la creciente escasez de alimentos y las crisis energéticas actuales.

Pensamiento final sobre el embargo prolongado

Mientras Estados Unidos se mantiene firme en su política hacia Cuba, la comunidad internacional clama cada vez más por la eliminación del embargo. La Asamblea General de la ONU seguirá siendo una plataforma donde este tema se abordará año tras año, y la presión sobre Estados Unidos está aumentando. Aunque el embargo contra Cuba ha cambiado ocasionalmente a través de diferentes fases, los problemas fundamentales que crea permanecen sin cambios. Cuba sigue sufriendo las consecuencias en casi todos los sectores de su economía, y su capacidad para afrontar desafíos globales, como pandemias y desastres naturales, sigue siendo significativamente reducida debido a las restricciones económicas. Por lo tanto, muchos expertos y actores internacionales creen que la eliminación del embargo no solo contribuiría a la prosperidad de Cuba, sino que también fortalecería el sentimiento global de solidaridad y cooperación, que son los objetivos clave de las propias Naciones Unidas.